Una vez comprados los descabezamos y les quitamos las vísceras y la raspa central, les damos un lavado con agua y los congelamos al menos durante 24 horas (con ello evitamos el contagio del ANISAKIS, parásito en estado larvario.)
Ingredientes:
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- 250 gramos de vinagre
- Sal
- 3 dientes de ajo
- Aceite de oliva virgen extra
- Perejil
Preparación:
Una vez descongelados, los ponemos en un bol y los cubrimos con el vinagre, una cucharada de sal y agua si fuera necesario porque no se quedaran cubiertos y los dejamos 12 horas en el vinagre para que cogan cuerpo y se queden blanquitos.
Pasado el tiempo indicado, los sacamos y los escurrimos un poco del exceso de vinagre los ponemos en un plato y les picamos los ajitos lo más pequeñitos que podamos, los bañamos con un buen aceite de oliva y espolvereamos perejil.
Estan buenísimos acompañados de una cervecita bien fría.
Felicidades por tu blog, me encanta. Una pregunta sbre esta receta: ¿Los boquerones se congelan una vez ya limpios y abiertos o los congelas enteros? Precisamente ayer preparé los boquerones y los he congelado hoy con aceite y ajo todo incluido. ¡No me acordaba de maldito bichito!!!! No sé cómo resultará el experimento. Ya te contaré.
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